Maravillas invernales en Wisconsin
Con bosques, vida silvestre y un increíble 15 000 (más o menos) número de lagos de agua dulce, esta sección del Medio Oeste de Estados Unidos es el patio de recreo definitivo para los amantes de la naturaleza y los entusiastas al aire libre. Y tendrá muchas oportunidades de aprovechar al máximo las joyas naturales del norte de Wisconsin, entre las que se incluye el Chequamegon-Nicolet National Forest, con 600 000 hectáreas.
Salir en barco, hacer senderismo, observar aves o explorar sin rumbo, unas vacaciones aquí brindan la oportunidad de respirar mucho aire fresco y recargar las pilas. El invierno es especialmente divertido en el norte de Wisconsin, donde cae nieve fresca con frecuencia.
Por su parte, el Wisconsin Concrete Park, en Phillips, es una visita obligada. El museo al aire libre, con 237 esculturas de hormigón y técnicas mixtas, fue construido por Fred Smith, leñador jubilado, artista autodidacta y músico de 1948 a 1964.
También está la historia infame del norte de Wisconsin: en Manitowish Waters se encuentra Little Bohemia Lodge, escenario del épico tiroteo de 1934 entre John Dillinger y su banda y el FBI. Y ningún viaje a “America's Dairyland”, también conocido como el “Estado del Queso”, estaría completo sin una visita al Farm Wisconsin Discovery Center de Manitowoc, una granja lechera en funcionamiento donde podrá aprender sobre la diversidad agrícola del estado, recorrer un establo de crías y pasear en minibús por un establo de estabulación libre que alberga más de 2 500 vacas lecheras.
Visitas obligadas: Explore Eagle River, la Snowmobile Capital of the World® (capital mundial de las motos de nieve) y la Hockey Capital of Wisconsin™ (capital del hockey de Wisconsin). Alquile una moto de nieve y recorra los más de 800 kilómetros de senderos panorámicos, y disfrute de las bellas vistas invernales con estilo, o pruebe a esquiar o a pasear con raquetas de nieve. Para los aficionados al hockey, Eagle River es también sede de los Pond Hockey National Championships de EE. UU., que se celebran cada invierno en los lagos helados de la comunidad.
Para comer: La comida reconfortante y el Medio Oeste son sinónimos, y The Honey Bear no es una excepción. Después de un largo día de actividades en Northwoods, pida el pescado frito o la sopa de pollo y albóndigas. Su paladar se lo agradecerá. A los amantes de la buena comida también les encantará Northfork Fin and Filet en Arbor Vitae. Pida el Fin & Filet del restaurante, un costillar de medio kilo (una libra) a la parrilla, acompañado de gambas salteadas, vieiras y una guarnición, o elija las bolas de puercoespín, albóndigas rellenas de pimiento verde, cebolla y arroz, bañadas en salsa roja y servidas con arroz silvestre o linguini.
Excursión de un día: Si busca un lugar legendario para esquiar, conduzca una hora y media hasta Granite Peak, uno de los mayores complejos turísticos de esquí del Medio Oeste, con 55 pistas repartidas en más de 80 hectáreas y cuatro parques progresivos, que ha sido un lugar muy apreciado por los esquiadores desde su apertura en 1937. Si visita la ciudad un fin de semana o un día festivo, asegúrese de reservar alquileres y entradas con antelación. Granite Peak forma parte del Rib Mountain State Park, que debe su nombre a una colina que se cree que es una de las formaciones geológicas más antiguas del planeta, formada hace mil millones de años. Esta zona protegida cuenta con más de 21 kilómetros de rutas de senderismo y una torre de observación de 18 metros a la que se puede subir para disfrutar de unas vistas espectaculares.