Islas de Malta y Gozo
Las costas de color miel trazan el contorno de Malta, una pequeña isla que alberga personas hospitalarias, maravillas naturales deslumbrantes y una rica historia. Situada en el corazón del Mediterráneo y en la encrucijada entre Europa y África, es una mezcla embriagadora de influencias culturales. Por ejemplo, la gastronomía maltesa: una mezcla armoniosa de sabores de Sicilia en Italia mezclados con una pizca de especias de sus vecinos del norte de África, todo entretejido con capas de la esencia culinaria propia de Malta.
Esta entrañable isla es un lugar para la aventura, la exploración y la relajación, todo en uno. Quizás no mucha gente lo sepa, pero es ampliamente considerada como uno de los mejores lugares para bucear en el mundo. Mientras tanto, las ciudades mezclan a la perfección la antigüedad y la modernidad. Los templos megalíticos de Malta insinúan un pasado prehistórico, pero también están presentes las atracciones modernas, como casinos, restaurantes, tiendas. Y con kilómetros de playas de arena y más de 300 días de sol, la isla es perfecta para pasear tranquilamente por la playa, descubrir diferentes bahías ocultas y simplemente relajarse bajo el sol y contemplar el horizonte en el océano.
Visitas obligadas: Eche un vistazo a una época pasada en la antigua capital de Malta, Mdina, una ciudad amurallada atemporal encaramada en la cima de una colina donde puede encontrar magníficos palacios, arquitectura barroca y reliquias antiguas. La mejor forma de explorar es perdiéndose a propósito. Entre deambular por las pacíficas y estrechas calles y detenerse en lindos cafés, diríjase a la majestuosa catedral de San Pablo de estilo barroco; déjese guiar por las campanadas de la catedral, que resuenan cada 15 minutos.
Para comer: Para conocer el verdadero sabor de Malta, visite La Pira Maltese Kitchen. Este restaurante familiar al aire libre ofrece un ambiente relajado y una selección de platos clásicos malteses entre los que elegir. Aunque el menú cambia con frecuencia, los platos tradicionales pueden incluir ġbejna (queso local frito), pulpo frito en la sartén e imqaret (un pastel dulce frito maltés). O, si prefiere comida mediterránea, visite L'Agape en Rabat. Este restaurante no solo sirve cocina contemporánea, sino que también funciona como una galería de arte con obras que adornan las paredes.
Excursión de un día: Para un viaje memorable y un poco de deleite sereno, tome el ferri a Gozo, la encantadora y pequeña isla hermana de Malta, y explore calas secretas y playas tranquilas lejos de las multitudes. Sienta la arena teñida de mandarina entre los dedos de los pies en la playa de Ramla Bay antes de darse un baño relajante en el océano. Cuando el sol empiece a ponerse, visite el puerto de Mgarr, un antiguo pueblo pesquero que aún conserva un aire de ciudad dormida, y pasee por los bares y restaurantes del paseo marítimo.